Racing sabía que era difícil su misión para clasificar a cuartos de final. Cumplió con su parte, es cierto, ya que ganó y goleó 4-0 con una actuación a pura contundencia. Pero desde las otras canchas no llegaron los goles que debían llegar y se quedó afuera. Se hablará de "fracaso", por el plantel que tiene Gustavo Costas, y hay algo en claro y es que Racing no quedó eliminado anoche, sino que los puntos que perdió durante la Copa, en especial de local, con tres derrotas, los pagó muy caro. La goleada ante el Pirata le sirvió para obtener su sexta victoria consecutiva entre todos los torneos, y para sumar pensando en la tabla general que clasifica a las Copas. Ahora, el próximo paso será el miércoles, en la Sudamericana, en Chile visitando a Coquimbo.
Dupla letal
Casi sin darse cuenta, Racing ganaba 2-0. A los 8, Arias sacó largó, Maravilla cabeceó, Solari desbordó por izquierda, centro atrás y Solari le rompió el arco a Losada. A los 17, tiro libre: Salas le dio fuerte, pegó en el travesaño, tocó en el "1" y Maravilla Martínez estaba donde tiene que estar un 9, para mandarla de cabeza a la red para el 2-0. Efectividad pura, con un esquema que le dio rédito, sin enganche (Juanfer está en Colombia por problemas personales) y con juego directo. La dupla Salas-Martínez se entendieron a la perfección y fueron un problema sin solución para la defensa local.
Belgrano se adelantó con Barinaga por derecha, con el manejo de González Metilli y Matías García, y la potencia de Jara. Arias tuvo una doble tapada ante Barinaga y Jara, en la única acción de peligro con sensación de descuento.
En el segundo tiempo, la pelota y el terreno eran del local, mientras la Academia buscaba cortar en el medio para salir rápido en busca de los de arriba. Lo tuvo Salas a los 17, pero se lo impidieron en la línea; a los 20 llegó el gol de Defensa, que lo dejaba afuera, y enseguida Belgrano casi descuenta con un tiro cruzado de Jara.
Desde el banco
A los 41, un misil de Roger Martínez estampó el tercero y enseguida, Baltasar Rodríguez, otro ingresado, puso el 4-0. Así, en los minutos finales, desde el banco, Gustavo Costas encontró la manera de estirar las cifras y de despedirse de la Copa de la Liga con un triunfo contundente. Pasó el primer certamen del año para Racing sin poder meterse entre los ocho. No cumplió con el primer objetivo, más allá de un nivel que le da esperanza para todo lo que se le avecina.
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